
Los culpables del desvanecimiento de los medios impresos que se barajan son dos. La alternativa más popular viene de la mano de Internet. Su inmediatez, interactividad y múltiples formatos y usos se ha convertido en una opción muy atractiva, sobre todo para los jóvenes. Según estadísticas entregadas en un artículo del Periodista Digital, los lectores de entre 15 y 24 años dedican un 30% menos a la lectura de los periódicos impresos desde el uso de Internet como medio de información.


Ante estas posibilidades, se dice que son los medios gratuitos los que más daño le están haciendo a los tradicionales en la actualidad. Sin embargo, a largo plazo, la verdadera amenaza sera online.

Los afectados en este entuerto son los mismos productores de contenidos: los periodistas. Según las estadísticas de la Asociación de Prensa de EEUU han bajado en un 18% los periodistas que trabajan bajo contrato desde 1990. Esta cifra es preocupante considerando las nuevas amenazas que se han puesto en el tapete respecto a los medios impresos y la vida que le quedan a estos mismos.
Pero este tipo de vaticinios, como el que realizó el señor Meyer no son una novedad. En tiempos anteriores este mismo tipo de pronósticos se hizo con la aparición de la radio y la televisión. Si bien estos finalmente no ocurrieron, si se gestó una reinvención por parte de los medios impresos. Más colores, más fotografías y más interacción fueron algunos de los mecanis

Este ejemplo es una muestra del camino a seguir para los medios tradicionales. Me parece que más allá de darse aires de Zulma, lo que realmente debiese preocupar a los medios es de cómo enfrentar el fenómeno de Internet. Tratar de innovarse es la mejor arma que tienen los medios para atacar. Un consejo que también es respaldado por el Finantial Times en el artículo “OldTube, NewTube” en el que se llama a mejorar la calidad de los servicios.
Si me preguntan a mi yo digo adiós a la brujería y el pesimismo y saludo a la innovación y la proactividad. Preocuparse de lo que pasará en 36 años más es inutil .
¿Ocupemonos mejor del asunto?